Orgón Bioenergizador redondo Metatron

Bioenergizador redondo de 12.5 cm de diámetro y 2 cm de alto con símbolo de Metatron, citrinos y pirita. Tiene incrustaciones de bronce y aluminio. Esta pieza es acompañada de una vela e incienso para que a través de una meditación guiada de Vero Fuentes purifiques y transmutes energía negativa en positiva.

La pirita (Pyrite) deriva su nombre de la palabra griega pyr, «fuego», porque la pirita emite chispas cuando es golpeada por un metal. Como talismán, la pirita es un protector único, extrayendo energía de la Tierra a través del cuerpo físico y hacia el aura creando un escudo defensivo contra energías negativas, contaminantes ambientales, ataque emocional y daño físico. También apoya a alguien con un espíritu de audacia y acción asertiva al proteger a los demás, al planeta o al defender problemas importantes de la comunidad. Estimula el segundo y tercer chakras, mejorando la fuerza de voluntad y la capacidad de ver detrás de las fachadas lo que es real. [Melody, 497] [Hall, 149] [Simmons, 315] [Ahsian, 315]

El cuarzo citrino es una piedra de manifestación: una manifestación, utilizada en el contexto del trabajo con cristales, se refiere a la proyección y programación de una persona en el cristal con el que se trabaja. En esencia, los cristales absorben lo que se llama sus deseos de manifestación, sus esperanzas y sueños más profundos, y luego ayudan a hacerlos realidad.

El Cubo de Metatron inicia con la flor de la vida y conecta los 13 círculos con líneas rectas. El cubo de Metatron incluye los 5 sólidos platónicos ocultos en su interior, que simbolizan los patrones geométricos subyacentes que se encuentran en todo nuestro universo. Lleva el nombre del Arcángel Metatrón, que vigila el flujo de energía en la creación y proporciona una conexión con lo divino. El cubo de Metatron es equilibrio en todas sus formas y proporciona un punto focal visual para la meditación. Ayuda reemplazar los pensamientos negativos por positivos.
El cubo de Metatron contiene todas las formas que existen en el universo que Dios ha creado, y esas formas son los componentes básicos de toda la materia física. Se les conoce como sólidos platónicos porque el filósofo Platón los vinculó con el mundo espiritual del cielo y los elementos físicos de la Tierra. Esas formas tridimensionales aparecen en toda la creación, en todo, desde cristales hasta ADN humano.