Orgón de Sedona – Disco de carga grande Lapislázuli OM

Disco de carga proveniente de Sedona, Arizona. Medidas 11.4 cm de diámetro y 1.2 cm de grosor. Disco de carga grande, holográfico con símbolo de OM, rhodizita, cianita, lapislázuli, turquesa y shungita. Esta pieza es acompañada de una vela e incienso para que a través de una meditación guiada de Vero Fuentes purifiques y transmutes energía negativa en positiva

Este poderoso y hermoso disco de carga incluye Cianita, rodizita, shungita, fenacita, cianita, turquesa extraída de Arizona, lapislázuli, turmalina negra, selenita, cobre, óxido de hierro, cristales de cuarzo triturados, latón y escamas de oro, así como un símbolo OM.

Lapislázuli: revela la verdad, aumenta tu visión interior, abre centros de chakras, te ayuda a controlar los conflictos, es la piedra de la amistad, equilibra el chakra de la garganta y el chakra de la corona. Puede traer las cosas más claramente a la mente. Los antiguos egipcios usaban el lapislázuli como símbolo de la verdad. El lapislázuli se usa con otras piedras cuando es necesario purificar y limpiar partes del cuerpo. El lapislázuli tiene alta intensidad y puede abrir muchos de los centros de los chakras. Esto debe hacerse solo con amor en el corazón y comprensión en la mente y sabiduría en el alma.

La turquesa es un excelente sanador; promueve la sintonía espiritual y mejora la comunicación con el mundo físico y espiritual. Colocado en el tercer ojo, mejora la intuición y la meditación. Es una piedra purificadora; disipa la energía negativa y elimina el smog EM. Infunde calma interior y ayuda a la expresión creativa. Es bueno para el agotamiento, la depresión y los ataques de pánico.

La shungita se encuentra en un solo lugar de la tierra, el área del lago Onega de Karelia, Rusia.
¡La shungita es un mineral milagroso! Esta piedra elimina y absorbe todo lo que representa un peligro para las personas y los seres vivos, pero concentra y restaura todo lo que es saludable para el ser humano. La shungita es un dispositivo de protección revolucionario para los daños electromagnéticos de las computadoras, hornos microondas, televisores, teléfonos móviles y otras creaciones de la civilización moderna.

La turmalina negra limpia, purifica y transforma la energía densa en una vibración más ligera. Es beneficioso para el jardín y las plantas y actúa como insecticida natural.

La rodizita es una piedra de energía verdaderamente positiva que nunca necesita ser limpiada o cargada. Se lo conoce como el Cristal Maestro; tiene la capacidad de multiplicar por diez la energía y las propiedades de cualquier piedra. Son una de las piedras vibratorias más altas del reino mineral. Se dice que los chamanes de Madagascar usan la rodizita para «nublar y despejar bloqueos, así como para activar todos los chakras. Físicamente, la rodizita es útil para la inflamación de los tejidos, el equilibrio del pH en el cuerpo, estabiliza la función cerebral y es un excelente refuerzo de energía para todos tipos de curación. Estos pequeños cristales tienen una forma natural de dodecaedro. Son pequeñas «bolas de fuego» de energía.

Se dice que los cristales de selenita se conectan con el cuerpo de luz o el espíritu superior. Con una energía vibratoria extremadamente fina, es una piedra muy espiritual, que atrae la guía y la conciencia de la conciencia angelical. Para aquellos interesados ​​en sintonizar con una vibración superior a través de la meditación, la selenita es una piedra muy útil. Es un cristal autolimpiante y se dice que ayuda en el juicio y la percepción, aclara la confusión y ayuda a ver una imagen más profunda.

Cianita. Los racimos o aspas en forma de abanico que están formados por cianita la convierten en una piedra ideal para restaurar el equilibrio energético. Es un conducto de energía muy eficaz que puede equilibrar la mayoría de los sistemas del cuerpo. Puede crear rápidamente quietud y tranquilidad, lo que la convierte en una piedra excelente para la meditación. Cianita ayuda a abrir la capacidad psíquica, mejora la comunicación telepática y ayuda en los sueños lúcidos.