$999.00
Pirámide de 8 cm x 8 cm de base y 8 cm de alto con simbolo de flor de la vida, una gran pieza de citrino en la punta y base de ojo de tigre
Agotado
Pirámide de 8 cm x 8 cm de base y 8 cm de alto con simbolo de flor de la vida, una gran pieza de citrino en la punta y base de ojo de tigre. Tiene incrustaciones de ferrita y Aluminio, ademas de otros cristales. Esta pieza es acompañada de una vela e incienso para que a través de una meditación guiada de Vero Fuentes purifiques y transmutes energía negativa en positiva.
La Flor de la vida es un mandala que se encuentra en tus células, en tu corazón y en tu ADN cuando incorporas a tu vida, en tus pensamientos, sentimientos, y físicamente este símbolo te ordenas a la creación Divina y perfecta que somos.
La orgonita está formada por resina, Metales y cuarzos cristalinos, y gracias a su composición puede invertir la energía negativa en positiva. Es un transformador natural. Por ejemplo: revierte la contaminación atmosférica, del suelo y del agua; es capaz de a absorber, equilibrar y liberar las ondas electromagnéticas y han sido alteradas por cualquier aparato electrónico (WiFi, microondas, teléfonos celulares, torres de luz, computadoras, etcétera). También purifica emociones trae paz, despierta la intuición, mejora la calidad del sueño…entre muchos otros beneficios. Existen muchas presentaciones orgonitas dependiendo de su función (uso personal, hogar, efecto terapéutico…) Varían en el tamaño, en la forma y en los minerales, cuarzos o metales que se incluyen.
El ojo de tigre se origina a partir de fibras de limonita incluidas en cuarzo. Si hay dos cosas que definen al ojo de tigre es la fuerza y el equilibrio. El ojo de tigre es muy útil para renovar nuestras energías y reforzar nuestra capacidad de confiar en nosotros mismos, aportándonos más seguridad, así como restaurar nuestro equilibrio interior.
El cuarzo citrino es una piedra de manifestación: una manifestación, utilizada en el contexto del trabajo con cristales, se refiere a la proyección y programación de una persona en el cristal con el que se trabaja. En esencia, los cristales absorben lo que se llama sus deseos de manifestación, sus esperanzas y sueños más profundos, y luego ayudan a hacerlos realidad.
Campo de protección: 12 m2